Los parásitos externos o ectoparásitos abarcan un amplio abanico de artrópodos parásitos, que son ácaros (garrapatas y ácaros) o insectos (pulgas, piojos picadores y chupadores, mosquitos, moscas y flebotomos [especie de mosquitos]).
Los síntomas clínicos que provocan las infecciones por ectoparásitos en el animal dependerán de la naturaleza y especie del parásito externo presente sobre su piel. Algunos síntomas que caracterizan a las infestaciones por algunos de estos parásitos externos (pulgas, ácaros, garrapatas, etc.) son:
- picor, rascado.
- frotado (el animal se restriega contra alguna superficie).
- mordisqueos lo bastante intensos como para provocar heridas abiertas.
- pérdida de pelo.
- mala calidad del pelaje.
Si aparecen estos síntomas, es importante consultar a su veterinario.
También es posible que su mascota no muestre signos de infestación ectoparasitaria (p. ej. garrapatas adheridas) o, en ocasiones, el único signo que presenta el animal es una garrapata adherida a la piel; es importante quitar cuanto antes el parásito para evitar las enfermedades que transmite.
Su mascota también puede presentar signos clínicos de alguna enfermedad sistémica transmitida por garrapatas o por flebotomos (p. ej., babesisosis, ehrlichiosis, leishmaniosis, etc.). Si presenta alguno de estos signos clínicos, acuda a su veterinario.